Entrada a Prote: Mayo 2021
A veces la suerte y el destino se unen en acontecimientos preciosos. Unas compañeras fueron a una perrera a rescatar a unos pequeños peludos. Max no estaba en la lista de perritos a salvar, pero hizo lo posible por llamar su atención. Y acabó haciéndose un huequito en sus corazones, y otro en su furgoneta. Así es como llegó al refugio, con la esperanza de un niño y los sueños de un adulto.
En la perrera decían que era muy dominante hacia las personas, pero realmente lo que le ocurre, es que es desconfiado. No le gustan las imposiciones por sorpresa, pues ya vivió muchas recluido en aquel chenil durante años…
Aun nos quedan cosillas que pulir de este pequeñajo, ya que tanto tiempo encerrado han hecho que sea nervioso y activo. Por suerte ahora tiene mucho espacio para descargar toda esa energía, pero su futura familia se tendrá que comprometer a continuar ese desgaste. Le encanta salir de paseo, hacer ejercicio, ir de excursión, aprender trucos y vivir aventuras al lado de alguien.
Convive en manada con muchos amigos peludos, a veces es un poco intenso, pero está aprendiendo a comunicarse a la perfección.
Es un perrito mimoso, potente, fuerte y con carácter, con ganas de comerse el mundo. Tira un poco de la correa, pero ya está aprendiendo a controlarse. Pero también es un perrito divertido y risueño, con ganas de disfrutar siempre un poco más.
Ha descubierto lo que mola ser querido y apreciado. Lo guay que es que los voluntarios te den constantemente mimos y chucherías, pero sobre todo, ha descubierto lo que significa vivir en paz.
Necesita a alguien con paciencia y ganas de aprender a su lado. A cambio, Max te regalará la confianza y la compañía fiel de un amigo eterno. ¿Te animas a darle una oportunidad a esta ovejita?
# Adopta a MAXIMILIANO y Salva Su Vida #
